Las redes sociales sirven para muchas cosas: para comunicarnos, para crear comunidad, crear y gestionar nuestra marca personal, trabajar, divertirse… pero por suerte, también para mucho más.
Me gustaría hablar de la faceta más positiva de las redes sociales, cuyos objetivos van más allá de simplemente comunicar personas, llegando en ocasiones a concienciar y modificar (¿por qué no?) conductas. Hay casos: desde la movilización de #ArdeValencia al compañerismo y altruismo de #DonaMedula.
Me gustaría comentar el Trending Topic #ididnotreport, ya que me puse a pensar en todo esto después de leer un post en el blog Marketing Comunidad. Todo empieza cuando la autora del blog London Feminist ve la campaña de la asociación Mumsnet llamada #webelieveyou (te creemos) en la que se pretendía demostrar que seguían existiendo crímenes sexuales contra las mujeres y al mismo tiempo derribar los mitos que hacen que tengan miedo de denunciar. A partir de ahí se lanza el hashtag #ididnotreport para que todas estas personas puedan dar ese paso de manera online, aunque sea anónima, mediante la creación de la cuenta de twitter @Ididnotreport1 desde la que podían postear directamente ya que se les proporcionaba el usuario y contraseña.
This twitter is for anyone who has suffered sexual violence female, male, bi, gay, transgender log in and tell your story YOU ARE NOT ALONE
— I did not report (@Ididnotreport1) March 17, 2012
No tardó mucho en ser Trending Topic y en ampliar su presencia online, en tener repercusión en otros países, e incluso en hermanarse con campañas paralelas como la francesa llamada “Pas de Justice, Pas de Paix” (Sin justicia, Sin paz)
Lamentablemente tampoco tardó mucho en salir gente que se aprovechó de ser una cuenta “pública”. Pero dejando de lado estas conductas (lamentablemente muy comunes en el mundo online puesto que es muy fácil escudarse en un avatar) esta cuenta de twitter consiguió que muchas de estas personas se atrevieran a utilizar este medio, sirviéndoles de alguna manera como terapia en ese momento determinado.
Sí…. he dicho terapia… ¿Alguien duda de que la descarga de frustraciones y miedos en ese tuit ha servido de terapia para muchas de estas personas? Podemos leer como hay personas que gracias a poder decirlo de manera anónima en Twitter, finalmente han tenido el valor suficiente para poder decirlo a sus amigos o familiares. Paso a paso. Y luego… ¿quién sabe?
Y no, no estoy diciendo que esto sustituya el tratamiento psicológico al que la mayoría seguramente estarán sometidos y que les dará las fuerzas necesarias para afrontar la vida con otra actitud. Sin embargo ¿alguien puede negar que les ha ayudado? ¡Aceptemos esta faceta de las redes sociales!
No podemos obligar a nadie a que hable con nosotros si no quiere o que denuncie ante la policía si no está dispuesta a pasar por ello. Pero sí que podemos apoyarlas y acompañarlas en el camino hasta el final. Las redes sociales pueden servir para mucho más de lo que estamos acostumbrados. Aprovechemos la facilidad que nos ofrecen de conocer más casos como el nuestro o el de un amigo; utilicémoslas para ayudar a los demás a superar situaciones difíciles, para unir a personas con los mismos problemas, traumas, enfermedades…. Al fin y al cabo hablar con extraños muchas veces es más fácil que hablar con los que nos rodean y escribir un blog personal puede que sirva como los diarios de antaño y nos ayude a ver las cosas de manera diferente.
¿Es un camino difícil? Sí. Y puede que no todos estemos igual de preparados para afrontar las redes sociales de esta forma, pero quizás con todo lo que se está diciendo de si existe o no burbuja debemos pensar también en los posibles usos de este tipo de herramientas a nivel terapéutico… ¿no creéis?